×

ALTA INCERTIDUMBRE EN EL CAMPO

A estas fechas normalmente el agricultor toma sus decisiones de qué cultivos y qué superficies sembrar tanto en granos como hortalizas, tomando en cuenta la disponibilidad de agua, las perspectivas de los mercados de las materias primas y los apoyos que el gobierno federal otorga a los agricultores. En este momento existe una alta incertidumbre en el panorama del sector agrícola, lo que dificulta la toma de estas decisiones.

De acuerdo con el Monitor Nacional de Sequía de México (MSM), la disponibilidad de agua a nivel nacional supera el nivel del año pasado, pero está por debajo del promedio en los últimos 5 años, presentando condiciones favorables para las siembras de primavera-verano, como es el caso del frijol.

Sin embargo, en el caso de Sinaloa, Sonora y Chihuahua, que son los que producen en el ciclo otoño-invierno, continúan presentando grados de sequía en la mayor parte de sus municipios. La disponibilidad actual en nuestro estado de las 11 presas es del 24%, que son 4 puntos menos que la del año pasado, que fue complicado, por lo que estamos lejos de disponer de agua para un ciclo normal de siembras, en el entendido que falta el mes de septiembre todavía, solo un evento extraordinario recuperaría un nivel razonable para hacer una buena planeación de cultivos.

De acuerdo con nuestros asesores externos de StoneX, que es una correduría internacional, las perspectivas de los mercados para las materias primas de granos, tienen una tendencia para el próximo ciclo agrícola hacia la baja, en cultivos como maíz, trigo, soya y sorgo, esto debido a situaciones de alta oferta a nivel internacional y particularmente en Estados Unidos, que es nuestro principal socio comercial.

Para el caso del maíz, proyectan una estimación de futuros para Julio del 2025 con precios promedio de 171 dólar, que son menores al ciclo pasado. En lo que respecta la base, se tendría que considerar para el caso de Sinaloa, la situación de disponibilidad de maíz para el próximo ciclo, que como ya se dijo es incierta.

Igualmente, para los trigos, la estimación de los futuros de mayo del 2025, para los trigos duros (HRW) presenta un promedio de 209 dólares, y en el caso de los trigos suaves (SRW) 233 dólares, que son significativamente menores que el año pasado.

Como se dijo en el artículo anterior, con este nivel de precios ni para los productores americanos es negocio sembrar granos, por lo que esto requiere adecuar sus esquemas de apoyo que están muy bien estructurados. En el caso de México como ya se ha observado, estos niveles de precio tampoco son redituables, lo que requiere de apoyos para poder seguir en la actividad.

En lo que corresponde a los programas de apoyo federales, como se ha mencionado en artículos anteriores, no existen esquemas definidos para el caso de los medianos y grandes productores de maíz, lo que significa que no tenemos una definición en este momento de cuál sería la política pública. En el caso del trigo, si existe un programa institucional para medianos productores, el problema es que los apoyos se han pagado en forma muy desfasada, como es el caso actual.

Nunca antes en los últimos años se había presentado una situación tan difícil, ya que se conjugan todos los factores mencionados, presentándose perspectivas muy complicadas, sobre todo para el sector de granos, por lo que esto es un reto que obliga tanto al productor como al gobierno a tomar decisiones trascendentales.

Por Marte Vega Román, Presidente de CAADES

Compartir